Recientemente y con motivo de la nueva exposición “La Escuela de Dibujo del Consulado Marítimo y Terrestre de Alicante” en el Laboratorio de Restauración de la Diputación de Alicante se ha intervenido la obra Diógenes de José Peyret y Bosque (1816-1851).
Era un trabajo muy anhelado por el equipo de restauradoras que lo habían tenido que aparcar por otras prioridades, hasta que el proyecto de la exposición mencionada les dio la oportunidad de intervenir el lienzo.
Vamos a mostraros una breve pincelada de la compleja intervención que tuvo esta obra.
ESTADO INICIAL
La obra presentaba, sobre todo, suciedad ambiental, un barniz oxidado y oscurecido y gran cantidad de intervenciones anteriores. Antiguamente, cuando la profesión de Restaurador de Bienes Culturales no existía, las personas que intervenían las obras solía ser los mismos pintores.
ANÁLISIS QUE AYUDAN AL RESTAURADOR
En la fotografía con luz ultravioleta (foto de tonos azules) se ven dos cosas. La primera, las zonas con pintura añadida en la intervención antigua (zonas azules oscuras, casi negras). Y la segunda, zonas donde falta la pintura original (zonas casi blancas de cerca de la cara).
En la foto de Reflectografía Infrarroja (foto en blanco y negro) también se ven las faltas de pintura y, además, nos ha parecido muy interesante enseñaros la zona donde en la foto con luz normal se apoya el codo de Diógenes. Parece una piedra o muro, y, sin embargo, en la foto de Infrarrojos se ve claramente como el pintor dibujó una especie de rueda o moneda de gran tamaño.
PROCESO DE INTERVENCIÓN
- Limpieza de la suciedad ambiental.
- Retirada del barniz oxidado.
- Limpieza de repintes
- Relleno de faltas y pérdidas.
- Reintegración cromática de las faltas.
- Se dan capas de barniz tras la limpieza y final tras la reintegración.
RESULTADO FINAL
Tras los trabajos de restauración sobre la obra, esta ha recobrado el sentido del conjunto y ha recuperado el color original que evidencia el esfuerzo del pintor por el tratamiento idóneo de las carnaciones que resaltan sobre el cromatismo propio de la naturaleza.
Además, la limpieza ha sacado a la luz detalles que antes estaban ocultos, como los fragmentos arquitectónicos o las pinceladas que dan lugar a la vegetación recreada de manera minuciosa. Incluso la tierra en primer término luce más y otorga, junto a la arquitectura desdibujada del fondo, mucha más profundidad a la obra.
Una restauración que, sin duda, ha contribuido a resaltar los preceptos que hacen referencia al mundo clásico con el mito del filósofo Diógenes inmortalizado por el pintor alicantino.